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Artículos

La evolución del término “Hacker”

21/Febrero/2024

TN Editorial

La palabra hacker ha pasado por cambios significativos a lo largo del tiempo, desde un elogio en las salas de universidad hasta una etiqueta con connotaciones tanto positivas como negativas en la cultura popular contemporánea. Este término, inicialmente asociado con habilidades excepcionales y creatividad técnica, ha experimentado cambios profundos a lo largo de las décadas, reflejando la evolución misma de la tecnología y la sociedad.

La palabra proviene del verbo en inglés “to hack”, traducido como “romper” o “golpear de manera brusca”. En informática se le dio un significado de “resolver creativamente”, asociándolo a las personas que solucionaban de manera rápida y creativa problemas informáticos. 

Su uso inició en la década de 1960 en el Instituto Tecnológico de Massachusetts. Los estudiantes de ingeniería y programación que mostraban habilidades excepcionales y un enfoque creativo para resolver problemas fueron llamados hackers. En este contexto, ser un hacker era un elogio, denotando habilidad y dedicación a la programación. 

Durante la década de 1970, que se llamó la era del movimiento de software libre, los hackers eran aquellos que compartían y colaboraban en la creación de software de código abierto, impulsados por el deseo de aprender y mejorar tecnologías existentes. 

El cambio de significado se dio en la década de 1980. A medida que las computadoras se volvieron más accesibles, el término hacker comenzó a adoptar connotaciones negativas. Los medios de comunicación y el público general asociaron la palabra con actividades ilegales y maliciosas, como la intrusión en sistemas informáticos y la manipulación de datos. Este cambio en la percepción llevó a la aparición del término cracker para referirse a aquellos que realizaban actividades negativas. 

Durante la década de 1990, surgió el término hacker ético para describir a aquellos que utilizaban sus habilidades para encontrar vulnerabilidades en sistemas con el propósito de mejorar la seguridad. La diferenciación entre hackers (positivos) y crackers (negativos) se volvió común.

En la actualidad, el término hacker tiene una connotación más amplia y abarca diversas actividades. Existen hackers éticos, que trabajan en seguridad informática, y hackers de sombrero negro, que realizan actividades maliciosas. Además, la cultura del hacker se ha extendido a campos como el hardware, la inteligencia artificial y la exploración de sistemas complejos.

Este término ha evolucionado desde sus inicios como un elogio en la comunidad tecnológica hasta una etiqueta con matices positivos y negativos en la cultura popular. La comprensión de su historia ayuda a contextualizar su uso y entender la diversidad de significados asociados con el término en la actualidad.

En este crisol de acepciones, desde elogios iniciales hasta estigmatizaciones modernas, el término hacker nos desafía a contemplar no solo su pasado, sino también su futuro. En una era donde la ciberseguridad es más crucial que nunca, la cultura hacker sigue desempeñando un papel vital en la protección de sistemas, la innovación tecnológica y la definición de límites éticos.

¿Cuál será su futuro? Seguramente seguirá evolucionando de acuerdo a las necesidades y usos que se le dé a la acción de resolver problemas informáticos. Sin embargo, dentro de su ambigüedad, el término hacker nos recuerda la necesidad de una comprensión matizada y una apreciación de la diversidad de perspectivas en el siempre cambiante panorama digital del siglo XXI.